El Gluten y la Enfermedad Celíaca

Con el avance en el conocimiento de la Enfermedad Celíaca en los últimos años, han emergido otros trastornos relacionados con la ingesta del gluten con un origen inmunológico diferente, en donde es conocido que existe una respuesta autoimmune en la mucosa intestinal cuando se expone al gluten en individuos  genéticamente susceptibles y que afecta aproximadamente al 1% de la población general.

Estos trastornos incluyen la alergia al trigo y la sensibilidad al gluten no celíaca.

La alergia al trigo, con una prevalencia del 1 al 3%, se caracteriza por una respuesta inmunológica adversa con la liberación de anticuerpos del tipo IgE  al contacto con las proteínas del trigo  que producen  una reacción alérgica casi inmediata, caracterizada por síntomas como nauseas, vómitos, dolor abdominal, rinitis, asma, urticaria y anafilaxia.
Se diagnóstica por pruebas de punción cutánea y determinación en sangre de IgE  frente a las proteínas del trigo.

La sensibilidad al  gluten no celíaca, sin definición clara y etiopatogenia todavía desconocida, presenta una prevalencia relevante  con respecto a la Enfermedad Celíaca y alergia al trigo ya que oscila del 0.5  al  18.5% según los estudios más recientes e incluye a todos aquellos individuos con síntomas gastrointestinales y extraintestinales que mejoran con la dieta sin gluten.

El diagnóstico es por exclusión de la alergia al trigo y la celiaquía. El 50% parecen presentar anticuerpos antigliadinas positivos.  En la práctica clínica, al no contar con biomarcadores específicos para su diagnóstico, se recomienda confirmar con la reincorporación del gluten en la dieta.

En relación a la Enfermedad Celíaca, todavía infradiagnosticada principalmente en pacientes adultos por  no manifestar los síntomas clásicos de mal absorción como la diarrea, dolor abdominal, vómitos y perdida de peso, presentan un amplio espectro de sintomatología generalizada.

Los más relevantes son la anemia en un 50%, dolores de cabeza, neuropatía periférica, osteoporosis y osteopenia con fracturas óseas espontáneas, ansiedad, depresión, fatiga y cansancio de manera crónica, lesiones en piel (dermatitis herpetiforme, eczemas, psoriasis, vitíligo) y síntomas gastrointestinales que asemejan una Enfermedad por Reflujo Gastroesofágico, Dispepsia Funcional o Síndrome de Intestino Irritable tales como ardores, acidez estomacal, digestiones pesadas, regurgitación, eructos, flatulencia, sensación de hinchazón y  malestar abdominal, aumento del número de deposiciones o estreñimiento.

Para el diagnóstico debe investigarse a todas las personas con estos síntomas y que presenten mayor riesgo de padecerlo, como aquellos con Síndrome de Down, Turner o Willians;  enfermedades autoinmunes como la Hepatitis autoimmune, Diabetes Mellitus tipo 1 y la Tiroiditis autoimmune o que tengan familiares de primer grado con esta enfermedad.
Los estudios diagnósticos que incluyen las pruebas serológicas y la biopsia duodenal son importantes en este  grupo de individuos.

Una vez diagnosticada la Enfermedad Celíaca, se debe iniciar una dieta sin gluten de manera estricta y guiada por un nutricionista. Los anticuerpos generalmente se hacen negativos al cabo de 3-6 meses e incluso hasta los 12 meses y la recuperación del daño histológico puede tardar hasta 3 años.
Un 20 % de los celíacos pueden permanecer sintomáticos  y con anormalidades serológicas e histológicas después de 2 años de dieta sin gluten en un 5%.
Estos pacientes quizás mantienen la ingesta de gluten de manera inadvertida, presentan varios trastornos asociados a atrofia de las vellosidades intestinales u otras patologías asociadas como la Intolerancia a la Lactosa, Síndrome de Intestino Irritable, Sobrecrecimiento bacteriano, insuficiencia pancreática y colitis microscópica.

En Clínica ServiDigest contamos con los conocimientos y las herramientas necesarias para diagnosticar los trastornos relacionados con el gluten, principalmente la Enfermedad Celíaca.

Son muchos los pacientes que tras años de sintomatología gastrointestinal catalogados dentro del grupo de trastornos funcionales, principalmente Síndrome de Intestino Irritable, han mejorado su salud y calidad de vida al ser diagnosticado de manera eficaz por los profesionales de Clínica ServiDigest.