La técnica de Dilatación Endoscópica trata de ensanchar las estenosis o estrecheces de diversos tipos que se puedan producir en el tramo digestivo superior o inferior y que sean accesibles con el endoscopio.
Existen diversos tipos de dilatadores y su utilización médica es muy antigua. Fundamentalmente son empleados hoy día los que se introducen a través del endoscopio, que consisten en balones conectados a una sonda que se llenan de aire o agua (dilataciones neumáticas e hidrostáticas respectivamente), los dilatadores en forma de bujía de material plástico y los dilatadores de olivas metálicas.
Estos dos últimos tipos utilizan un hilo guía de metal con punta atraumática que se inserta a través del endoscopio,siendo este último retirado antes de introducir la bujía, que es guiada por dicho hilo.
En cuanto a las indicaciones de la dilatación endoscópica, son tres los órganos digestivos donde ésta puede ser necesaria:
a) DILATACIÓN ESOFÁGICA: Fundamentalmente está indicada en las estenosis provocadas por el reflujo ácido y la esofagitis, ingesta de sustancias cáusticas y una enfermedad que produce un cierre permanente del esfínter del cardias, denominada acalasia. Puede haber también estenosis congénitas, como anillos o membranas esofágicas, o secundarias a intervenciones quirúrgicas, esclerosis endoscópica o radioterapia.
b) DILATACIÓN PILÓRICA: El píloro, esfínter que controla la salida del contenido gástrico, puede estrecharse de forma permanente por las cicatrices de una enfermedad ulcerosa previa, la ingesta de cáusticos o por lesiones producidas por la enfermedad inflamatoria intestinal (enfermedad de Crohn).
c) DILATACIÓN RECTO-CÓLICA: El tratamiento dilatador por vía endoscópica está indicado en pacientes que presentan estenosis benignas de recto o colon que puedan dan lugar a cuadros de suboclusión u oclusión intestinal. Las más frecuentes son las estenosis secundarias a anastomosis quirúrgicas y también la enfermedad de Crohn. En cuanto a las estenosis malignas del tramo rectocólico, las dilataciones endoscópicas son poco efectivas y comportan a menudo el riesgo de perforación.